sábado, 5 de marzo de 2011

Falleció Alberto Granado, amigo del Ché y de Cuba


5 Marzo 2011
 
Alberto Granado falleció a los 88 años en La Habana
Alberto Granado falleció a los 88 años en La Habana

Alberto Granado, el amigo y compañero del guerrillero Ernesto “Che” Guevara en su viaje de juventud en motocicleta por Suramérica, falleció hoy en La Habana a la edad de 88 años.
Granado, nacido el 8 de agosto de 1922 en Córdoba (Argentina) y afincado en Cuba desde 1961, falleció de muerte natural, explicó su hijo Alberto Granado.

Granado, fiel amigo de Cuba será incinerado este sábado en La Habana y sus cenizas se esparcirán en Cuba, Argentina y Venezuela, según su voluntad.

Amigo de la infancia del Che, fue su acompañante en el viaje que emprendieron en motocicleta en 1952 por Surámerica, un periplo que despertó la conciencia política del guerrillero argentino.

Sobre “La Poderosa”, la moto de Granado, recorrieron buena parte del cono sur hasta que, nueve meses después, se separaron en Venezuela.

Esa peripecia fue llevada al cine en 2004 en la película “Diarios de motocicleta”, dirigida por el brasileño Walter Salles e interpretada por el mexicano Gael García Bernal en el papel del Che y el argentino Rodrigo de la Serna como Alberto Granado.

Tras ese viaje Granado regresó a Argentina para trabajar como bioquímico, pero, tras el triunfo de la revolución cubana, el Che le invitó a venir a La Habana y, un año después decidió afincarse en la isla con su esposa, Delia, y sus hijos.

En 2008 Alberto Granado viajó a Argentina para participar en las celebraciones del 80 aniversario del nacimiento del Che Guevara en la ciudad de Rosario.

Su último viaje al exterior fue a Ecuador hace algunos meses, según dijo a EFE su hijo, quien destacó que su padre fue un “gran revolucionario” y un hombre que amaba mucho la vida.

(Con información de EFE)

El libro verde


 
 
 
 
María Luisa Etchart (Desde San José, Costa Rica. Especial para 
 
 ARGENPRESS CULTURAL)

Por un momento sentimos la alegría de presenciar la “rebelión de las masas” en Egipto, nos permitimos soñar con que podría ser el comienzo de una especie de erupción volcánica de las conciencias hartas de un sistema injusto, corrupto, producto de la acción de la sub -especie rapaz que, en su enferma carrera acumulaticia, ha olvidado al árbol, al aire puro, al agua, a los alimentos naturales como fuente de vida, para concentrarse en su necesidad de petróleo, de oro y diamantes como razón de sus vidas.

La realidad que nos rodea, de seres que parecen obnubilados por el objeto de culto que hacen de sus vehículos motorizados, de los siniestros aparatitos con luces e imágenes que parecen ser parte ya de las anatomías de sus manos y sin los cuales parecen imposibilitados de comunicarse o moverse, en contraste con las imágenes que a veces logramos percibir de adultos y niños transitando desiertos en busca de un bocado, de un trago de agua para no perecer de hambre y sed, hace que nos sea difícil esperanzarnos en la posibilidad de un socialismo ecológico donde reine la cooperación, el humanismo, el rescate de la maravillosa naturaleza de la que una vez gozamos, sin apreciarla en su justo valor.

Y, de pronto, tras algunos rebrotes de protestas pacíficas en varios países de Medio Oriente que han soportado gobiernos corruptos y autoritarios en connivencia con los intereses del supremo Imperio, sutilmente la cámara da un giro y se centra en Libia y Gadafi, que pasa a ser el villano de la película y objeto de la “preocupación” de Obama y la Clinton y una vez más el perverso juego que tuvo lugar en Irak y Afghanistán, y, más cerca geográficamente a nuestra realidad, en Honduras, recomienza.

Montones de “especialistas”, desde las pantallas de nuestros televisores, nos informan. Vivimos tan sumergidos en nuestra problemática cotidiana, que no creo haya muchos de nosotros que realmente sepamos algo de las realidades de esos países, pero de inmediato los medios locales se lanzan a crear opinión como verdaderos “expertos” en el arte de informar lo que nosotros, los “idiotisaurios” necesitamos aceptar y repetir como loritos amaestrados.

Hace más de 20 años, tuve la suerte de que un compañero de trabajo, a quien yo veía sacar de su escondite entre múltiples carpetas, un pequeño librito que leía con fruición en los descansos de mediodía, ante mi curiosidad, me prestara y compartiera algo que, de otro modo, jamás hubiera conocido: el “Libro Verde” de Gadafi, cuyo contenido me deslumbró por lo abarcativo de sus temas y claridad de sus conceptos.

Nada se ha sabido de Libia en todos estos años precisamente porque su experiencia fue distinta a la de sus vecinos: el petróleo fue nacionalizado, su pueblo que estaba sumido en la miseria y la ignorancia fue provisto de educación, de salarios dignos, de cuidado de la salud, nunca se hizo eco de prácticas terroristas pero tampoco se deslumbró con un modo de vida basado en el consumismo.

Libia se mantuvo al margen de las organizaciones mundiales que han servido de instrumento a la mal llamada “globalización”, que es en realidad una forma de dominio mental y económico sobre los pueblos y allí, en silencio, calladitos, intentaron crear una vida aceptable para sus habitantes.

Pero la codicia y la avidez insaciable de los rapaces no pudieron dejar pasar por alto la oportunidad que estas revueltas les ofrecían para intentar pegar su manotazo a un país que les había negado la apertura
a su modelito y de hoy en más tendremos que escuchar y ver cómo extraños “grupos rebeldes” se apoderan de los pozos petroleros e intentan dar por tierra con su líder.

Aunque no me cabe duda que el sistema de comunicación de internet sigue extendiendo sus aparentemente inofensivas redes para poder controlar el pensamiento, todavía disponemos de la libertad de poder buscar textos que nos ayuden a elaborar un pensamiento libre y amplio.

Anoche, gracias a esos buscadores, logré volver a leer “El Libro Verde” y les sugiero hacerlo para poder comprender mejor lo que se está intentando hacer, como una forma de resistencia hacia este desesperado dominio de las mentes con que se nos ataca desde distintos ángulos.
 

A LA REVOLUCION POR LA POESIA






En la dedicatoria de su libro TABERNA Y OTROS LUGARES (Premio "Casa de las Américas",1969), leemos: "Querido Jorge: Yo llegué a la revolución por la via de la poesia. Tú podrias llegar (si lo deseas, si sientes que lo necesitas) a la poesia por la via de la revolución. Tienes por lo tanto una ventaja. Pero recuerda, si es que alguna vez hubiese un motivo especial para que te alegre mi compañia en la lucha, que en algo hay que agradecérselo también a la poesia". Honestamente, reconoce que primero importa ser revolucionario y después ser poeta. De no haberlo reconocido aún estaria "fumando su margarita emocionante, bebiendo us dosis de palabras ajenas, volando con sus pinceles de rocio..."

Varios rasgos hacen actual y pertinente la poesia de Roque en el proceso de transformación que vive El Salvador. En primer lugar, el amor gigante que sus versos transpiran hacia el pais. No encantamiento paisajistico ni abstracción romántica, sino amor-odio: pasión destructivo-constructiva. Afán de destruir los viejos mitos, de convertir su palabra en bomba de tiempo contra la oligarquia y el gorilato, de devolver con cólera "el gran tanate pétreo de simbolos" falsos con que fué escrita la historia del pais", que será tal "cuandola clase obrera y el campesinado/ lo fertilicen, lo peinen, lo talqueen,/ le curen la goma histórica/ lo adecenten, lo reconstituyan/ y lo hechen a andar..."



Vida, Oficios


Insoslayable para la vida,
la nueva vida me amanece: es un pequeño
sol con raíces que habré de regar mucho
e impulsar a que juegue
su propio ataque contra la cizaña.
Pequeño y pobre pan de la solidaridad,
bandera contra el frío, agua fresca para la sangre:
elementos maternos que no deben alejarse
del corazón.
Y contra la melancolía, la confianza; contra
la desesperación,
la voz del pueblo
vibrando en las ventanas de esta casa secreta.
Descubrir,
descifrar,
articular,
poner en marcha:
viejos oficios de los libertadores y los mártires
que ahora son nuestras obligaciones
y que andan por allí contándonos los pasos:
del desayuno al sueño,
del sigilo en sigilo,
de acción en acción,
de vida en vida.

(VIDEO) Vea "Dossier" con Walter Martínez


Por: VTV / Aporrea.org
Fecha de publicación: 04/03/11

4 Mar. 2011.-Los sucesos internacionales y noticias de resonancia mundial en "pleno desarrollo" analizados por el periodista y corresponsal de guerra, Walter Martínez, a través de la señal del canal de todos los venezolanos, Venezolana de televisión.

“Dossier”, único en su estilo en la televisión venezolana, es una herramienta necesaria, que brinda información de actualidad, en un lenguaje directo y de fácil comprensión.